Detrás de la empresaria, filántropa y líder ambiental hay una mujer que comenzó su camino a los 14 años, construyendo desde cero un legado marcado por la pasión y el propósito. Originaria de Tlaxcala, Tere soñaba de niña con ser bailarina, pero la vida la llevó a crear algo más grande: Grupo Salvatierra, un conglomerado que incluye restaurantes con alma como Mesón de los Reyes, El Cornudo y Vaniloquio, además de una exitosa línea de comercialización de vinos, donde destaca su favorito, un rosado de guarda de Ribera del Duero. Sin herencias ni atajos, forjó su camino con esfuerzo, intuición y la convicción de que los negocios deben nutrir tanto el cuerpo como el espíritu.
Pero su verdadero legado late en lo humano, encuentra en su hogar la fuerza para transformar realidades. «Mi familia es mi raíz y mi motivación», confiesa, y ese amor se extiende a su obra: desde Fundación Salvatierra donde ha plantado más de 600,000 árboles, hasta el Vivero Salvatierra, que produce especies nativas y capacita comunidades para ser guardianes de sus bosques. Para ella, la filantropía es más allá que un título, es un acto cotidiano.
Presidenta fundadora de Grupo Salvatierra y Fundación Salvatierra, Tere es una persona que no cree en los liderazgos de escritorio, su oficina son los bosques de Puebla y Tlaxcala donde ha recuperado hectáreas incendiadas, junto con su equipo de trabajo que es su familia y las comunidades que ahora protegen sus recursos naturales.
Detrás de cada logro de Tere Salvatierra está el corazón de una mujer de familia, cuya fuerza y visión nacen de su compromiso con quienes la rodean, para ella, la filantropía y el liderazgo son extensiones de su vida personal, cada iniciativa, cada árbol plantado y cada comunidad apoyada llevan el sello de valores transmitidos en el hogar. Es esta conexión humana la que da sentido a su trabajo, transformando la responsabilidad social en un legado familiar que impulsa el desarrollo sostenible en México.
Bajo su dirección, la Fundación Salvatierra ha plantado más de 600,000 árboles con el proyecto «Un millón de árboles, ¡YA!», pero su verdadero logro está en cómo lo hizo: involucrando a ejidos, creando viveros comunitarios y asegurándose que esté en las zonas donde su crecimiento y desarrollo sea posible. No es solo una reforestación, es la regeneración de espacios desde las raíces sociales.
Tere Salvatierra es una líder excepcional cuya trayectoria ha dejado una huella imborrable en el ámbito empresarial, social y ambiental. Su labor incansable ha sido reconocida con numerosos galardones, doctorados y distinciones, entre los que destacan:
Doctorados y Reconocimientos Académicos
Investidura Doctoral “Honoris causa” otorgado en conjunto por la World University of Sciences y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Segundo Doctorado “Honoris Causa”, «Vida y Obra en Filantropía a la Familia Mexicana», entregado por la Universidad Palafoxiana y la Universidad de Artes y Oficios de México.
Tere Salvatierra encarna el poder transformador de un liderazgo que nace en el corazón del hogar y se extiende a la comunidad. Desde Fundación Salvatierra, misma que lleva el apellido que honra cada día, ha demostrado que la filantropía con enfoque familiar genera impactos más profundos y duraderos. Más allá de los reconocimientos, su verdadero legado está escrito en comunidades transformadas, y en las miles de familias impactadas a través de Fundación Salvatierra.
Tere ejerce un liderazgo que une el mundo empresarial con el compromiso social, como fundadora de Grupo Salvatierra y Fundación Salvatierra, ha creado un modelo donde los negocios y la filantropía se potencian mutuamente. Más allá de cargos, su verdadero legado está en tejer redes que transforman realidades, demostrando que el éxito se mide por su impacto en las personas. Cada iniciativa que impulsa, desde la restauración forestal hasta los programas de emprendimiento, lleva su sello distintivo.